Aretxabaletako Eusko Alkartasuna 

El proceso interno para definir las bases que servirán para definir una estrategia común entre las fuerzas soberanistas debe servir para hacer frente a la “la unidad de acción de la derecha española y el PSOE”. El proceso será muy similar al que ya realizó la formación abertzale en Nafarroa para definir los parámetros de su participación en Nafarroa Bai. “Será un proceso horizontal en el que los militantes de Eusko Alkartasuna tendrán la última palabra”, ha afirmado Urizar.

El secretario general de Eusko Alkartasuna ha afirmado que se constata que la voluntad de colaboración es común en todas las fuerzas abertzales, “pero no termina de concretarse y es necesario que se defina y se ponga negro sobre blanco para ofrecer una solución al proceso que vive el país”.

El proceso se realizará durante los meses de septiembre y octubre y se contará, además de con el conjunto de la militancia, con los cargos públicos que han trabajado para el partido en los últimos 23 años, “y habrá diferentes foros, el académico, el social, el institucional,…”.
El proceso parte de la constatación de que estamos ante “el triunfo de las estrategias políticas del nacionalismo español”, en una situación en la que “queda claro que hay una unidad de acción entre la derecha española y el Partido Socialista sobre todo sobre lo que hay que hacer en Euskal Herria”.

Frente a esta unidad de acción españolista que se da en la práctica, el dirigente soberanista constata que “los partidos abertzales no terminamos de aglutinar nuestras reivindicaciones en torno a una estrategia común, lo que hace que la estrategia de debilitamiento del PP y el PSOE se esté reforzando en perjuicio de los intereses de los derechos nacionales y democráticos de Euskal Herria”, a pesar de que la necesidad de una estrategia común entre abertzales es un planteamiento asumido y demandado por la mayoría social del país.

Urizar ha concluido diciendo que es importante que todos los partidos tengan la posibilidad de sentarse intervenir en la búsqueda de esa estrategia común pero que “ni nadie es imprescindible ni nadie tendrá la posibilidad de vetar esta estrategia”.